Marelli cerrará su planta italiana de componentes de motor de combustión de Crevalcore, que emplea a 230 trabajadores, ante la insostenibilidad del negocio de los motores de gasolina que trae consigo la transición a la movilidad eléctrica.
El cambio hacia una movilidad eléctrica implica que los motores de combustión interna, hasta ahora protagonistas de la industria automovilística, darán paso paulatinamente a los motores eléctricos. Estos cambios no solo plantean retos a los propietarios de talleres, operadores y concesionarios, sino que abren nuevas oportunidades.